Creencias limitantes, qué son y cómo liberarnos de ellas
La importancia de identificar las creencias para poder cambiarlas
¿Qué son las creencias limitantes?
Las creencias son ideas, opiniones, pensamientos y puntos de vista personales que se tienen sobre la vida, conformando nuestra manera de entender el mundo. Las hemos ido interiorizando en nuestra mente desde la infancia, la mayoría de forma inconsciente, y sin darnos cuenta, dirigen nuestros actos y nos impulsan a actuar de una u otra forma, condicionando nuestra felicidad.
Las consideramos ciertas aunque no lo sean en realidad, y nos minan la autoestima y la autoconfianza, llegando a ser como trampas en las que caemos con frecuencia.
Hay muchos métodos que ayudan a identificar y cambiar creencias limitantes, como la PNL, que utiliza sistemas de probada eficacia para la comprensión y la superación de aquello que nos acontece.
Si las cambiamos experimentando una nueva creencia, podemos cambiar nuestro modelo de realidad.
A veces lo que crees de ti no es real. Es básico conocerse a una misma, observarse de forma realista (en cuanto a talentos y limitaciones) y vivir la vida como tú quieres vivirla.
Hay tres tipos de creencia limitantes: de capacidad, de posibilidad y de merecimiento.
Ejemplos: «No soy capaz, no soy suficiente…», «Las demás personas son mejores, más importantes, valen más que yo…», «No puedo ir, hacer, ser… porque…», «Nunca consigo lo que quiero», «Tengo que esforzarme mucho para ser merecedora de…»
¿Cómo liberarnos de las creencias limitantes?
La mayoría de las personas tenemos varias creencias limitantes. Para un abordaje efectivo, tendremos que ir identificándolas y escribiéndolas en un cuaderno, para luego desestructurarlas de una en una.
No te compares, deja el pasado atrás y toma acción para cambiarlas:
Busca el origen de tu creencia, quién lo dice o quién lo decía: madre, padre, abuelos, amigos, jefes… Lo más seguro es que esa creencia no sea ni tuya.
- ¿Lo que crees es así siempre? ¿Es verdad de acuerdo con quién?
- ¿Para qué te servía actuar así? Descubre su beneficio, ya que en teoría la creencia tiene una intención positiva. ¿De qué te protege? ¿Por cuál puedes sustituirla? ¿Con la nueva creencia logras la intención positiva de la antigua?
- Darte cuenta de lo poco que te ayuda la creencia limitante te ayudará a que la dejes atrás, y la sustituirás por otra más realista y positiva.
- Sé flexible. Si las creencias son rígidas nos adaptaremos menos al entorno y a las circunstancias.
- Date cuenta de cuántos conflictos tienes en tu vida. ¿Cómo los afrontas?
- Reformula la creencia en positivo. Puedes repetirla como un mantra, escribirla cada día hasta integrarla.
- Visualízate en detalle consiguiendo tus deseos gracias a esa nueva creencia, sintiendo y disfrutando de las buenas sensaciones que te genera, de todo lo que te aporta.
Recuerda que lo primero es querer cambiar la creencia, lo segundo reformularla en positivo (merezco lo mejor… puedo conseguir… soy capaz de lograr…), lo tercero darte cuenta de las consecuencias que tendría cambiar las creencias limitantes por otras potenciadoras (qué cambiará en mi vida, qué me aportará la nueva creencia, cómo mantendré los beneficios de la anterior creencia)
Finalmente, tomar conciencia de todo, agradecer a la creencia limitante todo lo que hizo por ti antes de decirle adiós. Mantener lo bueno de la creencia antigua y sustituirla por la nueva creencia, estando convencida de ella. Si compruebas que reaccionas en tu vida de acuerdo a la anterior creencia PARA, y repite la nueva creencia potenciadora hasta creértela.
Ejemplos de frases potenciadoras que pueden conventirse en tus creencias potenciadoras:
- Soy suficiente, soy capaz, estoy capacitada
- Yo sí importo
- Voy a poder hacerlo
- Puedo conseguir lo que me proponga cuando es un objetivo realista
- Valgo mucho y fluyo en una vida llena de amor
- Merezco lo mejor de la vida
Si necesitas acompañamiento en el proceso, contáctanos.