Mujeres valientes

Somos mujeres valientes y empoderadas porque nos reconocemos vulnerables, abrazamos nuestras sombras, las aceptamos, aprendemos a convivir con nosotras mismas y con los demás.

Nos dimos cuenta de nuestra enfermedad, nuestra dependencia y cómo las emociones son una montaña rusa que nos hacen ir de un lado a otro sin control.

Al mismo tiempo nos dimos cuenta de lo valientes y empoderadas que somos, que decidimos conscientemente ponernos manos a la obra y recuperarnos. Nos hacemos el firme propósito de crecer, desarrollar nuestros dones y resurgir de entre los escombros de nuestra vida.

Es importante que nos demos cuenta que somos mucho más que mujeres que sufren, que aman demasiado. Además somos fuertes, valientes y con muchas capacidades para salir del pozo, de la noche oscura del alma y salir a comernos el mundo. ¡Nos lo merecemos TODO!

Somos guerreras en cada desafío, en cada reto, y nos valoramos a nosotras mismas y a lo que hay en nuestro entorno. Somos capaces de vernos amorosamente, cuidadosamente, y así dar a los demás de forma equilibrada.

Te damos las gracias una y mil veces por estar ahí, compartiendo con nosotras.

Estamos realizando un trabajo invisible, de muchas horas, que no se ve en las reuniones, pero del que se benefician muchas mujeres. Horas de entrevistas, de redactar mails, de contestar llamadas y whassaps, de acompañamiento personalizado de cada mujer. Esta labor tiene unos costes que se han de sufragar, y tener conciencia de ello, a la vez que participar en el mantenimiento de esta asociación colaborando monetariamente, ayuda a sostener esta plataforma. Es motivo de un saludable empoderamiento saber que participo en el sostén de un colectivo de ayuda mutua.

Queremos tener relaciones sanas y tomar las riendas de nuestra vida. Para que ello se produzca, es lógico que la asociación reciba aportaciones para sostener esta comunidad. Llámese conciencia, sororidad, compromiso… Para dejar de ser «Mujeres que aman demasiado» es importante establecer relaciones de equilibrio en absolutamente todos los campos relacionales.

Desde ADAB agradecemos las donaciones. Es importante para nosotras, y para vosotras, valorar el tiempo que nos dedicamos a superar todo aquello que nos hace sufrir. Valorar el trabajo que hacemos en el grupo, es valorarnos a nosotras mismas y nos empodera. Gracias, gracias, gracias.

Programa EMIN