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La auto-responsabilidad

Un pilar básico para una sana autoestima y sentir felicidad

 

¿En qué consiste la auto-responsabilidad?

Pues en pensar y actuar por una misma, y ser consecuente con los resultados.  De ese modo tienes mayor sensación de control sobre tu vida, pues al asumir la responsabilidad de tus actos, inicias tu propio camino hacia las metas que te proporcionan felicidad.

Ser responsable de una misma es una forma de manifestar autoestima, y supone admitir que:
. Soy responsable de cuidar de mi cuerpo y de mis pensamientos
. Soy responsable de conseguir lo que deseo
. Soy responsable de mis elecciones y de mis acciones
. Soy responsable de la manera de estructurar el tiempo y mi trabajo
. Soy responsable de la calidad de mis comunicaciones
. Soy responsable de mi felicidad
. Soy responsable de elevar mi autoestima
. Soy responsable de elegir mis propios valores

¿Quién maneja mi barca, quién?

¿Manejas tu vida, o permites que otras personas la manejen? En gran medida, nosotras  decidimos lo que nos causa bienestar emocional, y somos quienes dirigimos nuestros pensamientos y seleccionamos nuestros actos. Es cierto que muchas veces decidimos desde nuestro inconsciente, sin darnos cuenta de las creencias que hay solapadas.

Sin embargo, somos nosotras quienes aceptamos o adoptamos los valores bajo los cuales nos regimos y dirigimos en nuestras vidas. Voluntariamente, por educación o por presión social, pero lo decidimos. Por lo que también hay que ponerlos a veces en cuestión, revisarlos y decidir si se continúan con los mismos o se seleccionan otros nuevos.

Somos protagonistas de nuestras vidas y de nuestra conducta. Hemos de ser cuidadosas al decidir nuestras acciones, pues siempre tendrán consecuencias.

Si sientes un deseo, o una necesidad, eres responsable de conseguirlo, de satisfacerlo, para tu bien y el bien de las demás. Nada de tirar la pelota a otro tejado, eso te quita tu poder.

Cada una de nosotras es responsable de la manera en la que hablamos, escuchamos, nos conducimos con las demás, de las promesas que cumplimos y también de las que incumplimos.

Somos responsables de elegir con quién nos relacionamos, cuánto tiempo les dedicamos y qué aportamos cuando estamos con ellas.

Cuando nos hacemos cargo de nosotras mismas, las relaciones con todas los demás personas que nos rodean mejoran cualitativamente. El entorno cambia.

Ahora me viene a la mente el libro transformador «Los cuatro acuerdos«, de Miguel Ruíz, pura sabiduría tolteca que da herramientas prácticas para vivir en paz, amor y libertad. Para mí es como una guía práctica resumida sobre auto-responsabilidad:

«Sé impecable con tus palabras, no te tomes nada personal, no hagas suposiciones, y haz siempre tu máximo esfuerzo»

La física cuántica confirma que creamos nuestra realidad, así que lo lógico es hacernos responsables de nuestras creaciones, ¿no te parece?

¿Y tú? ¿Te haces responsable de tu vida?

Si crees que podemos ayudarte, contáctanos.

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